Vivir la sencillez es
no necesitar tener muchas cosas para ser feliz, no cayendo en el
consumismo ni en las modas que nos obligan a comprar lo nuevo, lo
último.
Vivir la sencillez es
tener más alegrÃa al dar, o al compartir, que al recibir, porque has
descubierto el poder misterioso que tiene la palabra gratuidad.
Vivir la sencillez es
vaciar el corazón de todas las cosas innecesarias que lo ocupan, y
llenarlo del tesoro de la amistad, de la cercanÃa y del encuentro humano
con los demás.
Vivir la sencillez es creer que tu valÃa y dignidad está en lo que eres como persona y no en lo que tienes o posición social que ocupas.
Vivir la sencillez es
solidarizarte con tantas hermanas y hermanos de tu familia humana que
viven injustamente en la pobreza y necesidad, y te movilizas e implicas
porque no quieres vivir mejor que ellos.
Vivir la sencillez es
poner tu confianza y seguridad no en el dinero o posesiones, sino en
tus bienes espirituales, en tus convicciones y creencias, en tu fe, en
tus capacidades, en tu fuerza interior y en la de aquellos que te aman y
aprecian.
Vivir la sencillez es trabajar para vivir y no vivir para trabajar.
Vivir la sencillez es
disfrutar de los innumerables regalos que la vida, la naturaleza, te
ofrece constantemente cada dÃa, y que pasan desapercibidos para la
mayorÃa de gente.
Vivir la sencillez es respetar y cuidar de la naturaleza con tu forma de vivir, reciclando, reutilizando, reduciendo el consumo innecesario.
Vivir la sencillez es
utilizar tu dinero para que tú y tu familia podáis vivir con dignidad, y
para que los demás también puedan vivir con dignidad si lo inviertes en
banca ética y si te habitúas a exigir productos que provengan del
comercio justo y del comercio local.
«Vivir el decálogo de la sencillez». Campaña Institucional 2011-2012 de Cáritas
Este dÃa de Adviento trata sobre que tenemos que pensar un poco menos en nosotros y mas en la gente que no tiene nada, porque aunque pensemos que somos poco afortunados en la vida, siempre habrá gente que lo esté pasando peor, hay gente que no tiene comida ni ropa, no sabe como mantener a su familia, y sus hijos no tienen juguetes para divertirse, asà que es necesario hacer pequeños gestos que puedan hacer grandes cosas como donar bienes materiales que ya no utilicemos, participar en campañas etc... y sobretodo no despreciar lo que tenemos. Lo mejor es estar cerca de tu familia, acompañándolos en todo momento, compartiendo felicidad... porque como bien dice este dÃa del Adviento:
ResponderEliminar-Vive sencillamente,para que otros,sencillamente puedan vivir. =)
Inés DÃaz Chaves. 2º ESO.
Hay que ser sencillo en la vida, no necesitamos muchas cosas para ser feliz. La sencillez es alegrarse más al dar que al recibir, se más generosos y solidarios y ayudar a los más necesitados, que con pequeñas acciones los puedes hacer feliz. También tenemos que valer por lo que somos como personas, no por lo que tenemos materialmente ni por el dinero
ResponderEliminarAlba González Feo 4ºA
La sencillez incluye muchos aspectos de nuestra vida: disfrutar de los regalos de la naturaleza, compartir nuestras cosas con los demás, conformarnos con pocas cosas para ser felices, vivir cada momento con nuestras familias en armonÃa, valorar todas las maravillas que nos ofrece Dios con su bondad.
ResponderEliminarMientras más sencillos seamos y más ofrezcamos a nuestros semejantes, más felices seremos y más felices haremos a las demás personas.
Samantha Sánchez Montesinos 2ºESO
Vivimos en la sencillez porque tenemos fé en Dios, en una sonrisa inesperada, en una caricia, en un amanecer o a una noche estrellada de Fuerteventura junto a la familia y seres queridos. Esto no se compra con dinero.
ResponderEliminarLucÃa y Jesús Corrales Cerdeña. 4º E.S.O.A